Sólo un ingenioso maestro de la pintura y el arte podría deleitarnos con tan exquisitas y poéticas frases.
Si... Hablo de René Gobert.
El pintor que no dejo que un artefacto
representará una amenaza para los pintores y por ello decidió matar a su
creador... George Eastman, aquel quien registró bajo su marca el nombre de la tan reclamada Kodak.
En un principio le pensé mucho en comprar este libro, no llama la atención ni el título, ni la portada.
Sin embargo, no hay que juzgar por la portada y este libro presentaba a un empresario a cuya vida y creación de su invención, si me atraía bastante, por lo que decidí leerlo.
Esta obra ha recibido la mención honorífica ... pertenece al sello de Sanborns también, tiene una historia
interesante que he de admitir, al principio no me atrapó por completo. Comienza con una narración un tanto aburrida, tenemos a un pintor y aun chico normal que un día dijo : "Yo quiero hacer fotografía"
Entonces, comienzan a narrar sus aventuras y experimentos para dar con el primer prototipo de una buena "cámara". La historia esta narrada en dos partes intercaladas por los dos protagonistas, y mi preferida...es la del pintor.
Continúe leyendo justamente por las frases de René Gobert que llamaba mi atención con sus palabras y con sus actos de locura... así son los artistas, pero la del inventor George Eastman, no tanto.
Creo que lo más interesante que sucede en sus narraciones es cuando René intenta matarlo. Pero bueno, ambos de alguna manera terminan ligados el uno con el otro, sin dejar en claro al lector quien rayos ha desatado una persecusion entre ambos personajes, sólo hasta quiza los últimos diez capítulos comienza lo verdaderamente interesante... vamos a descubrir quien está fotografiando a estos dos personajes a los que la locura los esta envolviendo....
Entonces, comienzan a narrar sus aventuras y experimentos para dar con el primer prototipo de una buena "cámara". La historia esta narrada en dos partes intercaladas por los dos protagonistas, y mi preferida...es la del pintor.
Continúe leyendo justamente por las frases de René Gobert que llamaba mi atención con sus palabras y con sus actos de locura... así son los artistas, pero la del inventor George Eastman, no tanto.
Creo que lo más interesante que sucede en sus narraciones es cuando René intenta matarlo. Pero bueno, ambos de alguna manera terminan ligados el uno con el otro, sin dejar en claro al lector quien rayos ha desatado una persecusion entre ambos personajes, sólo hasta quiza los últimos diez capítulos comienza lo verdaderamente interesante... vamos a descubrir quien está fotografiando a estos dos personajes a los que la locura los esta envolviendo....
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