¡HABLEMOS DE MANGAS! - JOY DE ETSUKO

¡Hola, lectores! 

El día de hoy me emociona mucho hacer esta entrada. Y es que ha pasado un rato desde que he venido hablarles de una de mis pasiones más grandes, que es leer manga. 

Así que he decidido traerlo de vuelta, y es que como he mencionado anteriormente, últimamente solo me pasan dos cosas:  

O no encuentro lecturas que me lleguen a gustar como quisiera o me la paso enferma. 

Y yo sé que apenas les conté que ya me había recuperado y por eso ya había subido las reseñas, pero para mí mala suerte, no fue así y he vuelto a enfermarme. Pero eso no será motivo para ausentarme otra vez. 

Sin embargo, algo que voy a agradecer en cualquier momento de mi vida, es que los mangas siempre me salvan de TODO, en especial un género que considero bastante cute y de lo más cómico.  

Y ese es el BL, mejor conocido como “Boys love” o “amor de chicos”. 

Quizá para algunas personas todavía siga siendo algo que genere de que hablar, sin embargo, en lo personal a veces me canso de lo cliché y lo más usual. Quiero leer un romance intenso, que salte más allá del estereotipo y que me cause tanta emoción que pueda llorar de la felicidad. Y eso lo he encontrado precisamente con el BL. 

Así que hoy me he visto en la necesidad de venir a platicarles de una novedad que ha traído Distrito manga (el nuevo sello de PRH) y ese es JOY. 

¿DE QUÉ TRATA? 

Gô Okazaki es un mangaka especializado en shoujos que, con la inestimable ayuda de su asistente Yusuke, se pasa las jornadas ideando historias que calen hondo en sus lectoras. Sin embargo, el mismo día que descubre por casualidad que Yusuke es gay, su editora le propone dibujar un manga BL. Gô acepta el reto, pero enseguida se encuentra en un callejón sin salida: no se le ocurre ninguna idea buena para la trama. Finalmente, se decidirá a fingir que siente algo platónico por su asistente para, con suerte, lograr estimular su imaginación y crear así una buena historia. Pero ¿Qué pasaría si esos sentimientos se transformaran en algo real? 

"No quiero pensar que estoy solo, pero... Hace mucho tiempo que conozco está sensación". 

 

No tengo palabras para expresar todo lo que este manga me hizo sentir, ¡demasiadas emociones! 

Y todas ellas MUY positivas. 

La relación de Gô y Akune, a pesar de ser "compañeros de trabajo", es más que una simple amistad que de jefe y asistente, ya que después del trabajo, siempre van a darse una ducha a los baños públicos y casi siempre Gô acude al departamento de Akune cuando tiene problemas con sus bocetos, a todas horas y sin importar el momento. 

 

No obstante, cuando descubre a su asistente con otro hombre en su casa y este le confiesa que es Gay, comienza a verlo de diferente manera (pero no de forma negativa, sino más bien... de curiosidad). Sobre todo, cuando su editora le propone escribir un BL. Ya que podrá sacar provecho de lo que su asistente sabe, poniendo así en práctica lo que sentiría tener un amor no correspondido con Akune. 

 

Pero le sale mal cuando al final los sentimientos que resultaban ser una mentira, comenzaron a volverse realidad. 

 

¿Qué pasará cuando Gô descubra que está enamorado de un chico y que esté es su asistente? 

Vamos a empezar a decir que el mangaka es un chico muy inocente, un tanto tímido por lo que no tiene muchos amigos. Así que se imaginaran que tampoco tiene tanta experiencia en el amor, por lo que de a poco y comenzando a ver a su asistente por sus preferencias sexuales, comienza a descubrirse él mismo también.

 

Por lo que será una historia llena de malentendidos, mucho humor y celos que no son capaces de ver hasta que todo se aclara entre los abrumadores sentimientos de amor.

 

La verdad es que es una historia fantástica, con un dibujo encantador y con unos personajes que son capaces de enamorar a cualquiera, ya quisiera yo tenerlos como amigos.  

Pero quisiera que me cuenten, ¿han encontrado un género que al principio no les llamaba la atención y al final termino por convertirse en uno de sus favoritos? 

Personalmente hasta mis tiempos de prepa, jamás me imagine que terminaría por convertirme en una fugoshi en toda la extensión de la palabra.